'Todavía no está claro si Zapatero está con las víctimas o con los Castro'
Me reencuentro con Guillermo Fariñas seis meses después. Han pasado tres semanas desde que dejó la huelga de hambre y sed que estuvo a punto de costarle la vida. Fueron 135 días de ayuno. Las secuelas son visibles. No puede andar. Tiene los tobillos hinchados y le faltan fuerzas todavía para guardar el equilibrio. Ha perdido casi toda su masa muscular.Nota completa aquí.
A este tipo nada le acomoda!!!!
ResponderBorrarQué lo regresen a Cuba!!