“Todo para nuestros hijos”
Durante el primer minuto del 24 de marzo, la titular de la Asociación Madres de Plaza de Mayo, Hebe de Bonafini, subió a la tarima que está en el salón de atrás del bar El Revolucionario, que inauguraron esa noche. Con ayuda de dos colaboradores, se sacó el camisaco rojo, con botones, que tenía puesto. Una polera negra, el pañuelo blanco. Se sentó en una silla de plástico blanca atrás de una mesita de madera, en la que había una botella de agua mineral. En las primeras dos filas, frente a la tarima, había otras doce madres. Algunas tenían sueño, otras no paraban de hablar. Todas estaban preparadas para escucharla. Durante su discurso, que fue también el broche para la inauguración del bar, Bonafini reivindicó a los hijos de las Madres como revolucionarios. Nota aquí.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario