El lento camino a la destrucción
“- ¿Mi generación? ¿Eso existe?”
Inquiere Jonás, protagonista de Los nadadores, y la pregunta precipita un sobresalto de inquietud en el lector. ¿Existe nuestra generación? ¿Existimos? ¿O, como los personajes de esta novela, maniobramos en torno a la destrucción sin admitir que la ciudad ha quedado devastada por el vacío?. Crónica aquí.
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