jueves, mayo 17, 2012

Manuel Cuesta,

Infiltrada
ABRUMADO estoy por la intrepidez de Cristina Cifuentes, delegada del Gobierno, porque dicen que asistió a algunas de las asambleas del 15M disfrazada con vaqueros y una gorra. Ella lo niega. Supongo que en aras de saber qué es lo que se cocía desde dentro, así se desactiva un sistema. Desde entonces no pude evitar fantasear con que la delegada se quedase también de madrugada para alzar bien las manos, gritar las consignas revolucionarias de marras y recogerse esa melena rubia mientras que la policía intentase desalojar la plaza. Crónica aquí.

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