La gran aventura de ser periodista.
Se estrenó con la muerte de Manolete, sí, con apenas 17 años. Poco después cruzó África de Cairo a Cabo, casi sin dinero, pero con algunos contactos y mucha desenvoltura. Persiguió las historias como si fueran novias y tras una prima enamorada hizo escala en Cuba y allí se paró a retratar a Castro, al Che, a Camilo, a Raúl, cuando aún no habían bajado de Sierra Maestra. Nota aquí.
Interesante fotografía. A poco más y no reconocía al Che.
ResponderBorrarSaludos.