viernes, julio 31, 2020
Kevin Johansen
"La fiesta es una forma de protesta"
El músico acaba de lanzar en plataformas digitales la canción "The Available 20’s”, en clave swing y charleston.
Hace un par de años, el músico Kevin Johansen vio en la esquina de un bar de Nueva York la euforia de un grupo de jóvenes bailando y divirtiéndose. Entonces, en un ejercicio temporal, se puso a pensar en “aquellos '20, los 'años locos' motorizados por la prosperidad económica después de la guerra” en Estados Unidos. Una época de prohibiciones pero también de celebraciones. “Es un poco un pensamiento sobre los ciclos, los tiempos históricos, y que será de estos nuevos años '20. ¿Serán años locos también? Bueno, ya lo son, el 2020 arrancó muy loco”, dice Johansen y traza un paralelismo con la actualidad. El resultado es “The Available 20’s” , un single en clave swing y charleston que acaba de lanzar en plataformas digitales. La otra novedad es que el cantautor nacido en Alaska realizará un ciclo de cuatro conciertos temáticos vía streaming desde La Tangente. El primero se transmitirá en vivo este martes 28 de julio a las 19 a través de la plataforma Tickethoy Live , con un repertorio de canciones propias en español. Los próximos shows serán el 8 de agosto (canciones propias en inglés), el 18 de agosto (canciones propias y ajenas) y el 28 de agosto (canciones latinoamericanas). Nota aquí.
El músico acaba de lanzar en plataformas digitales la canción "The Available 20’s”, en clave swing y charleston.
Hace un par de años, el músico Kevin Johansen vio en la esquina de un bar de Nueva York la euforia de un grupo de jóvenes bailando y divirtiéndose. Entonces, en un ejercicio temporal, se puso a pensar en “aquellos '20, los 'años locos' motorizados por la prosperidad económica después de la guerra” en Estados Unidos. Una época de prohibiciones pero también de celebraciones. “Es un poco un pensamiento sobre los ciclos, los tiempos históricos, y que será de estos nuevos años '20. ¿Serán años locos también? Bueno, ya lo son, el 2020 arrancó muy loco”, dice Johansen y traza un paralelismo con la actualidad. El resultado es “The Available 20’s” , un single en clave swing y charleston que acaba de lanzar en plataformas digitales. La otra novedad es que el cantautor nacido en Alaska realizará un ciclo de cuatro conciertos temáticos vía streaming desde La Tangente. El primero se transmitirá en vivo este martes 28 de julio a las 19 a través de la plataforma Tickethoy Live , con un repertorio de canciones propias en español. Los próximos shows serán el 8 de agosto (canciones propias en inglés), el 18 de agosto (canciones propias y ajenas) y el 28 de agosto (canciones latinoamericanas). Nota aquí.
Fernando Lucini
Fernando nos cuenta en su Blog.
MI VIDA ENTRE CANCIONES 3
Cuando tenía aproximadamente un año y medio, la familia completa se trasladó de Girona a Jaén. Mis recuerdos infantiles de aquellos primeros años sureños no son muchos, pero algunos revolotean aún en mi memoria con nitidez.
Al llegar a Jaén nos instalamos en el gran caserón donde vivía mi abuelo materno; estaba situado en la calle Las Novias, nombre que siempre me ha intrigado, sobre todo por ese plural. ¿A quién y por qué se le ocurrió llamar así a aquella calle empedrada del casco antiguo de la ciudad?
Me lo he preguntado muchas veces y nunca había logrado averiguarlo hasta que, colaborando recientemente en el programa de Radio Nacional Esto me suena. Las tardes del Ciudadano García, conocí a Miriam Plaza. Crónica aquí.
jueves, julio 30, 2020
Fernando Lobo
Víctor nos cuenta en su Blog.
"VERSOS ROBADOS" ES EL NUEVO DISCO DE FERNANDO LOBO.
Hace unos meses el cantautor gaditano Fernando Lobo consiguió grabar su nuevo disco gracias a más de 150 mecenas que le apoyaron a través de Verkami. Fernando lleva muchos años regalándonos su talento en forma de canciones y de poesía. Además tiene un humor muy gaditano que, por ejemplo, le ha llevado a recorrerse todo Cádiz en los últimos carnavales (qué bien se vivía antes de la maldita pandemia) contándonos "La historia SAgeRADA" ante centenares de personas que reían con sus versos satíricos.
Aún no he podido escuchar al completo "Versos robados" pero el gran Fernando Neira explica muy bien en su web "Un disco al día" los pormenores del disco. Lo que sí os puedo contar es que Fernando ha musicado los versos de poetas tan diferentes (y maravillosos) como Lorca, Gloria Fuertes, Fernando Quiñones o Juan José Téllez (con el que por cierto se acaba de subir a un escenario para presentar su libro "Crónicas urbanas"). En el disco hay colaboraciones maravillosas. Zenet interpreta junto a Fernando un bolero que se llama "La canción del dibujante" (que puedes escuchar en el vídeo de abajo). También canta "Nana tonta" con Kino Maján, "Aunque lejos" con Gualberto, "Coplas de Pilar" con Inma Márquez y Paco Luque, y Europa con Laura B. Crónica aquí.
Rodolfo Serrano
Noche en la aldea
Hace una noche espléndida. Relucen
muy lejanas las luces de los pueblos,
igual que estrellas rojas. Por el campo
se escuchan esquilones y ladridos.
Un cárabo, en la higuera que hay enfrente
repite una advertencia milenaria.
Está ya todo en paz. En la farola,
se estrellan los insectos. Por la calle
pasa un niño corriendo. Se despierta
este recuerdo dulce de otro tiempo,
cuando el mundo era joven y tenía
la exacta proporción que habita el hombre.
Me entrego a la quietud que me rodea.
En la terraza leo
-no sé ya cuántas veces-
a Don Ramón. El Marqués, feo,
católico y sentimental,
me habla de Concha.
Y de su amor maldito y desgraciado.
Escucho sus palabras. Y me cuenta
de esas pasiones fieras y adoradas,
las que todos soñamos.
Le escucho mientras canta
el placer del pecado y rememora
los jardines umbríos del palacio.
El universo de meigas y conjuras,
las iglesias oscuras y los cuentos
de muertos y de almas en pena
recorriendo los montes y caminos.
Me susurra tantas cosas en la noche.
Y, sobre todo,
amigo Bradomin, qué razón tiene:
lo que importa no es ser primer amor.
Es ser el último.
Hace una noche espléndida. Relucen
muy lejanas las luces de los pueblos,
igual que estrellas rojas. Por el campo
se escuchan esquilones y ladridos.
Un cárabo, en la higuera que hay enfrente
repite una advertencia milenaria.
Está ya todo en paz. En la farola,
se estrellan los insectos. Por la calle
pasa un niño corriendo. Se despierta
este recuerdo dulce de otro tiempo,
cuando el mundo era joven y tenía
la exacta proporción que habita el hombre.
Me entrego a la quietud que me rodea.
En la terraza leo
-no sé ya cuántas veces-
a Don Ramón. El Marqués, feo,
católico y sentimental,
me habla de Concha.
Y de su amor maldito y desgraciado.
Escucho sus palabras. Y me cuenta
de esas pasiones fieras y adoradas,
las que todos soñamos.
Le escucho mientras canta
el placer del pecado y rememora
los jardines umbríos del palacio.
El universo de meigas y conjuras,
las iglesias oscuras y los cuentos
de muertos y de almas en pena
recorriendo los montes y caminos.
Me susurra tantas cosas en la noche.
Y, sobre todo,
amigo Bradomin, qué razón tiene:
lo que importa no es ser primer amor.
Es ser el último.
La Rambla
Coronavirus en la Argentina. La Rambla: otro restaurante mítico que no resistió la crisis y cerró después de 57 años.
La cuarentena por el coronavirus determinó el cierre del histórico restaurante La Rambla, en Posadas y Ayacucho, que tenía 14 empleados; el actor Robert Duvall fue uno de sus famosos clientes .
"Seguí hasta donde pude, pero esta situación me superó y dije basta", confiesa con dolor Pablo Suárez, propietario del mítico restaurante "La Rambla", que durante 57 años fue el punto de reunión de políticos y personajes del ambiente artístico en la coqueta esquina de Posadas y Ayacucho, en el barrio de Recoleta, en el bajo de Ciudad Autónoma de Buenos Aires. La cuarentena por el coronavirus fue demasiado.
"A medianos de junio vimos que ya no podíamos más", afirma. El staff del restaurante involucraba a catorce empleados, muchos de ellos formaban parte de esa estirpe de mozos (muy apreciados por los porteños) de más de treinta años de experiencia con gran memoria y discreción. Silvina Ocampo, Adolfo Bioy Casares hasta Graciela Alfano, Jorge Asís, Robert Duvall y Ricardo Darín fueron algunos de sus clientes famosos. Nota aquí.
La cuarentena por el coronavirus determinó el cierre del histórico restaurante La Rambla, en Posadas y Ayacucho, que tenía 14 empleados; el actor Robert Duvall fue uno de sus famosos clientes .
"Seguí hasta donde pude, pero esta situación me superó y dije basta", confiesa con dolor Pablo Suárez, propietario del mítico restaurante "La Rambla", que durante 57 años fue el punto de reunión de políticos y personajes del ambiente artístico en la coqueta esquina de Posadas y Ayacucho, en el barrio de Recoleta, en el bajo de Ciudad Autónoma de Buenos Aires. La cuarentena por el coronavirus fue demasiado.
"A medianos de junio vimos que ya no podíamos más", afirma. El staff del restaurante involucraba a catorce empleados, muchos de ellos formaban parte de esa estirpe de mozos (muy apreciados por los porteños) de más de treinta años de experiencia con gran memoria y discreción. Silvina Ocampo, Adolfo Bioy Casares hasta Graciela Alfano, Jorge Asís, Robert Duvall y Ricardo Darín fueron algunos de sus clientes famosos. Nota aquí.
miércoles, julio 29, 2020
René Favaloro
René Favaloro, el médico que entregó su corazón
“El desastre social de Latinoamérica está en todos lados. A mí me duele porque hay una clase que lo tiene todo y el resto ahí abajo, desprotegidos", aseguraba en su prédica contra la desigualdad y la violencia.
Favaloro nació en 1923 en la ciudad de La Plata y a los cuatro años ya manifestaba sus ganas de “ser doctor” y de trabajar en el campo de la salud. Según solían comentar en su círculo familiar, las ganas de ser médico las heredó de su tío que desarrollaba esta profesión y a veces lo invitaba a pasear por su consultorio. Para el pequeño René, que cursó la primera en una escuelita de su barrio “El Mondongo”, significaba toda una aventura. Casi como rutina, luego de hacer los deberes, se iba al taller de carpintería de su padre y allí transcurrían buena parte de sus tardes, entre muebles y maderas refinadas, con olor a aserrín y ruido a serrucho. Su mamá era modista y, desde un principio, en su casa se respiró la cultura del trabajo. Nota aquí.
“El desastre social de Latinoamérica está en todos lados. A mí me duele porque hay una clase que lo tiene todo y el resto ahí abajo, desprotegidos", aseguraba en su prédica contra la desigualdad y la violencia.
Favaloro nació en 1923 en la ciudad de La Plata y a los cuatro años ya manifestaba sus ganas de “ser doctor” y de trabajar en el campo de la salud. Según solían comentar en su círculo familiar, las ganas de ser médico las heredó de su tío que desarrollaba esta profesión y a veces lo invitaba a pasear por su consultorio. Para el pequeño René, que cursó la primera en una escuelita de su barrio “El Mondongo”, significaba toda una aventura. Casi como rutina, luego de hacer los deberes, se iba al taller de carpintería de su padre y allí transcurrían buena parte de sus tardes, entre muebles y maderas refinadas, con olor a aserrín y ruido a serrucho. Su mamá era modista y, desde un principio, en su casa se respiró la cultura del trabajo. Nota aquí.
Café contado
Café contado nos cuenta por Facebook.
Los notables
Durante los años que viví en Boedo pasé las mañanas de sábado en el Margot. Asistí, así, a conciertos permanentes de música de cafés. Charlas animadas, risas amigas, cucharas golpeando tazas de loza, el motor de la cafetera, la puerta vaivén chocando a cada rato, pero además, y apenas perceptibles, los silencios. En esa armoniosa sonoridad, de pronto, todos los instrumentos musicales respondían a la orden del Director deteniéndose y produciendosilencio. Un día supe que en esas pausas residía la música del café. El detalle me lo enseñó Diego Ruiz, historiador, quizás el porteño que más sabía sobre la historia de nuestros bares y cafetines, parroquiano del Margot y uno de los grandes evangelizadores que tuvieron las misas de 11 de cada sábado en la esquina de Boedo y San Ignacio. Una mañana, en el medio de una charla que Diego monopolizaba con su infinito saber, se produjo una de estas interrupciones
que hice notar en el acto con supina ignorancia. Diego, generoso, y melómano, me regaló una clase maestra con una cita adecuada como reveladora, para mi melódico desconocimiento, que perteneciera a Debussy: en el espacio que hay entre las notas vive la música. La frase se hundió en mis pensamientos mientras Diego seguía, no lo recuerdo, pero debió ser así, narrando historias de fondas y cabarutes de arrabal.
En el recuerdo que me viene hoy de la charla, Diego continúa tirando data valiosa que no supe retener. Pero, conservo lo que ese enunciado me enseñó y la lectura y observación que tuve de cada bar y la ciudad a partir de entonces. Porque esa mañana cuando salí del Margot miré hacia ambos lados de la avenida y noté que Boedo, con sus cafés, era un barrio que en pocas cuadras (de Independencia a San Juan) ofrecía varios tipos de músicas, aunque las melodías del legendario Café Dante ya no sonasen y fueran leyenda, pero, por sobre todas las cosas, confirmé que si como afirmaba el genial músico francés en el espacio que hay entre las notas
vive la música, en los espacios que hay entre cada bar vive Buenos Aires.
Ilustración: @cantinilucio
#relatos #storygram #cafésdebuenosaires #losmartesrelato #margot #baresnotables
Los notables
Durante los años que viví en Boedo pasé las mañanas de sábado en el Margot. Asistí, así, a conciertos permanentes de música de cafés. Charlas animadas, risas amigas, cucharas golpeando tazas de loza, el motor de la cafetera, la puerta vaivén chocando a cada rato, pero además, y apenas perceptibles, los silencios. En esa armoniosa sonoridad, de pronto, todos los instrumentos musicales respondían a la orden del Director deteniéndose y produciendosilencio. Un día supe que en esas pausas residía la música del café. El detalle me lo enseñó Diego Ruiz, historiador, quizás el porteño que más sabía sobre la historia de nuestros bares y cafetines, parroquiano del Margot y uno de los grandes evangelizadores que tuvieron las misas de 11 de cada sábado en la esquina de Boedo y San Ignacio. Una mañana, en el medio de una charla que Diego monopolizaba con su infinito saber, se produjo una de estas interrupciones
que hice notar en el acto con supina ignorancia. Diego, generoso, y melómano, me regaló una clase maestra con una cita adecuada como reveladora, para mi melódico desconocimiento, que perteneciera a Debussy: en el espacio que hay entre las notas vive la música. La frase se hundió en mis pensamientos mientras Diego seguía, no lo recuerdo, pero debió ser así, narrando historias de fondas y cabarutes de arrabal.
En el recuerdo que me viene hoy de la charla, Diego continúa tirando data valiosa que no supe retener. Pero, conservo lo que ese enunciado me enseñó y la lectura y observación que tuve de cada bar y la ciudad a partir de entonces. Porque esa mañana cuando salí del Margot miré hacia ambos lados de la avenida y noté que Boedo, con sus cafés, era un barrio que en pocas cuadras (de Independencia a San Juan) ofrecía varios tipos de músicas, aunque las melodías del legendario Café Dante ya no sonasen y fueran leyenda, pero, por sobre todas las cosas, confirmé que si como afirmaba el genial músico francés en el espacio que hay entre las notas
vive la música, en los espacios que hay entre cada bar vive Buenos Aires.
Ilustración: @cantinilucio
#relatos #storygram #cafésdebuenosaires #losmartesrelato #margot #baresnotables
Jorge Marrale
"Estamos en una especie de paréntesis fantasmagórico"
La Sociedad Argentina de Gestión de Actores Intérpretes, que este lunes cumple 14 años, asiste a sus afiliados, afectados por la crisis de la pandemia, a través del programa "Palabras mayores". Desafíos y reclamos de la entidad.
Sin escenarios, sin público y sin fecha de regreso, los y las artistas arman redes de contención para paliar la crisis. Y la Sociedad Argentina de Gestión de Actores Intérpretes (SAGAI) -que desde 2006 trabaja para gestionar y administrar colectivamente los derechos intelectuales de actores, actrices, bailarines y bailarinas- es uno de los espacios donde circula esa solidaridad.
“Este parate es muy doloroso para todos. Estamos viviendo un momento complejo para la humanidad. Es como una especie de paréntesis fantasmagórico”, describe el actor Jorge Marrale, Presidente de la entidad que este lunes cumple 14 años y trabaja activamente para acercar ayuda a sus miles de socios. Nota aquí.
La Sociedad Argentina de Gestión de Actores Intérpretes, que este lunes cumple 14 años, asiste a sus afiliados, afectados por la crisis de la pandemia, a través del programa "Palabras mayores". Desafíos y reclamos de la entidad.
Sin escenarios, sin público y sin fecha de regreso, los y las artistas arman redes de contención para paliar la crisis. Y la Sociedad Argentina de Gestión de Actores Intérpretes (SAGAI) -que desde 2006 trabaja para gestionar y administrar colectivamente los derechos intelectuales de actores, actrices, bailarines y bailarinas- es uno de los espacios donde circula esa solidaridad.
“Este parate es muy doloroso para todos. Estamos viviendo un momento complejo para la humanidad. Es como una especie de paréntesis fantasmagórico”, describe el actor Jorge Marrale, Presidente de la entidad que este lunes cumple 14 años y trabaja activamente para acercar ayuda a sus miles de socios. Nota aquí.
Joaquín Pérez Azaústre
El planeta Marsé
«Los hombres y mujeres de Marsé esperan todavía una oportunidad»
Los hombres y mujeres del planeta Marsé esperan todavía una oportunidad. La aguarda el niño inquieto que ve llegar al barrio a un desconocido, en Un día volveré, sin saber que se trata de su tío Jan Julivert, ese legendario boxeador, guerrillero y atracador de bancos, que seguía siendo un héroe mitológico en las sombras volubles de una guerra que en el Guinardó ya sólo era un humo de silencio y juegos infantiles. La espera también Juan Marés, en El amante bilingüe, cuando lo abandona su casi aristocrática, voluptuosa y atractiva mujer, y entonces se decide a volver a nacer como Faneca: un charnego faltón, pero con elegancia abrupta en su carácter algo atrabiliario, en el que se desdobla también la identidad del propio Juan Marsé/Marés, pero que, en cualquier caso, con un artificio de apariencia y de brutalidad, confiaba en poder reconquistarla convirtiéndose en otro. Ese amor perdido que persigue Faneca/Juan Marés disfrazándose de un hombre que no es, esa ambición un poco Gatsby de reedificar un personaje desde las ruinas de la realidad, no es otra cosa que el Pijoaparte de Últimas tardes con Teresa desde el ángulo inverso: en vez del chulazo que trata de pasar por un pijín de la burguesía barcelonesa colándose en las fiestas con jardines y altos torreones, es un hombre ya maduro, pero perteneciente también a ese mismo mundo, el que decide convertirse en un nuevo Pijoaparte, con ese punto tosco de beligerancia y descaro, pelo abrillantado y un parche cruzándole la cara, no para lograr acceder a la fiesta, como el Pijoaparte cuando se cuela en ella, sino para volver a entrar. Nota aquí.
«Los hombres y mujeres de Marsé esperan todavía una oportunidad»
Los hombres y mujeres del planeta Marsé esperan todavía una oportunidad. La aguarda el niño inquieto que ve llegar al barrio a un desconocido, en Un día volveré, sin saber que se trata de su tío Jan Julivert, ese legendario boxeador, guerrillero y atracador de bancos, que seguía siendo un héroe mitológico en las sombras volubles de una guerra que en el Guinardó ya sólo era un humo de silencio y juegos infantiles. La espera también Juan Marés, en El amante bilingüe, cuando lo abandona su casi aristocrática, voluptuosa y atractiva mujer, y entonces se decide a volver a nacer como Faneca: un charnego faltón, pero con elegancia abrupta en su carácter algo atrabiliario, en el que se desdobla también la identidad del propio Juan Marsé/Marés, pero que, en cualquier caso, con un artificio de apariencia y de brutalidad, confiaba en poder reconquistarla convirtiéndose en otro. Ese amor perdido que persigue Faneca/Juan Marés disfrazándose de un hombre que no es, esa ambición un poco Gatsby de reedificar un personaje desde las ruinas de la realidad, no es otra cosa que el Pijoaparte de Últimas tardes con Teresa desde el ángulo inverso: en vez del chulazo que trata de pasar por un pijín de la burguesía barcelonesa colándose en las fiestas con jardines y altos torreones, es un hombre ya maduro, pero perteneciente también a ese mismo mundo, el que decide convertirse en un nuevo Pijoaparte, con ese punto tosco de beligerancia y descaro, pelo abrillantado y un parche cruzándole la cara, no para lograr acceder a la fiesta, como el Pijoaparte cuando se cuela en ella, sino para volver a entrar. Nota aquí.
martes, julio 28, 2020
Reynaldo Sietecase
"Escribir poesía es una experiencia mística"
La antología incluye un libro inédito y una selección de poemas de toda su obra. Los martes y los domingos Sietecase realiza presentaciones virtuales de lectura, con buena repercusión. "Internet es muy amigable con la poesía", señala.
El joven que repartía sus poemas por las mesas de los bares de Rosario, a comienzos de los años 80, nunca imaginó que se dedicaría al periodismo y a la narrativa. Ser poeta –estar a la intemperie—era como tener una marca en la frente: se sentía invencible en su debilidad. En Lengua sucia (Lumen), antología personal que incluye un libro inédito y una selección de poemas de toda su obra, Reynaldo Sietecase plantea que “escribir poesía es una experiencia mística, un acto de fe en la palabra”. La lengua del poeta, “lista para la esgrima”, es “insumisa”, “un manantial de blasfemias”. “Quiero ver quién se anima/ a lidiar con su afán/ A bañarse en el néctar/ de su oscura saliva”, se lee en el poema que da título al libro. Nota aquí.
La antología incluye un libro inédito y una selección de poemas de toda su obra. Los martes y los domingos Sietecase realiza presentaciones virtuales de lectura, con buena repercusión. "Internet es muy amigable con la poesía", señala.
El joven que repartía sus poemas por las mesas de los bares de Rosario, a comienzos de los años 80, nunca imaginó que se dedicaría al periodismo y a la narrativa. Ser poeta –estar a la intemperie—era como tener una marca en la frente: se sentía invencible en su debilidad. En Lengua sucia (Lumen), antología personal que incluye un libro inédito y una selección de poemas de toda su obra, Reynaldo Sietecase plantea que “escribir poesía es una experiencia mística, un acto de fe en la palabra”. La lengua del poeta, “lista para la esgrima”, es “insumisa”, “un manantial de blasfemias”. “Quiero ver quién se anima/ a lidiar con su afán/ A bañarse en el néctar/ de su oscura saliva”, se lee en el poema que da título al libro. Nota aquí.
Fernando Lucini
Fernando nos cuenta en su Blog.
MI VIDA ENTRE CANCIONES 2
Cuando tenía aproximadamente un año y medio, la familia completa se trasladó de Girona a Jaén. Mis recuerdos infantiles de aquellos primeros años sureños no son muchos, pero algunos revolotean aún en mi memoria con nitidez.
Al llegar a Jaén nos instalamos en el gran caserón donde vivía mi abuelo materno; estaba situado en la calle Las Novias, nombre que siempre me ha intrigado, sobre todo por ese plural. ¿A quién y por qué se le ocurrió llamar así a aquella calle empedrada del casco antiguo de la ciudad?
Me lo he preguntado muchas veces y nunca había logrado averiguarlo hasta que, colaborando recientemente en el programa de Radio Nacional Esto me suena. Las tardes del Ciudadano García, conocí a Miriam Plaza. Crónica aquí.
lunes, julio 27, 2020
Sara Sanz Arcas
**Versos de verano**
¿Respetarán mis ojos,
los límites del cuerpo?,
¿Traspasarán las barreras
del canon, y se ensoñarán
mis manos con lo lleno de tus
sesos?
¿Romperán los cinceles
las viejas estructuras y quedará
un abstracto y ecléctico resto?
Intento corregir mis adicciones,
reconducir las indomables preferencias,
ignorar a la tendencias que explotan,
y retumban sobre el paraíso de la nada.
Desacreditar lo apetecible de un segundo
predecible y eterno,
rasgando sutilmente
la inteligencia.
Me entrego a ti verano inadecuado,
para que me reconduzcas,
al lado opuesto
de su cuerpo.
¿Respetarán mis ojos,
los límites del cuerpo?,
¿Traspasarán las barreras
del canon, y se ensoñarán
mis manos con lo lleno de tus
sesos?
¿Romperán los cinceles
las viejas estructuras y quedará
un abstracto y ecléctico resto?
Intento corregir mis adicciones,
reconducir las indomables preferencias,
ignorar a la tendencias que explotan,
y retumban sobre el paraíso de la nada.
Desacreditar lo apetecible de un segundo
predecible y eterno,
rasgando sutilmente
la inteligencia.
Me entrego a ti verano inadecuado,
para que me reconduzcas,
al lado opuesto
de su cuerpo.
Íñigo Coppel
Coppel cinco meses después
El romántico e irónico cantautor dylanita getxotarra Íñigo Coppel interactuó con la audiencia atenta y conmovida que atendió a su matinée sabatina en el pub Residence
El romántico, mitómano y dylanita cantautor Coppel (tiene familia alemana, como reveló antes de una canción), un getxotarra residente en Madrid, dio el sábado al mediodía su primer concierto tras cinco meses de parón pandémico en el pub Residence, que se llenó de gente salvando las distancias. Reconocimos a músicos como Francis Doctor Deseo, Dani Merino, Lee Perk y uno de Los Retros, y a ilustres como Bolo, amigo del artista, quien ofreció un recital de 16 canciones en 87 minutos levemente menguantes pero siempre estupendos («perdonad que esté desentrenado, es normal en los tiempos actuales», se excusó al final el muy autocrítico que actúa siempre sin atril).
Abrió la sesión hablando de sí mismo en 'El pueblo contra Íñigo Coppel' («gracias por venir a escuchar a este santo que a veces se cansa de luchar» reza la letra trágica y no creemos que victimista; al acabar la primera bromeó el cantautor rock: «cinco meses sin tocar, estoy agotado»), cerró también hablando de sí mismo pegado a la barra en 'La balada de Íñigo Coppel' (con gorgoritos duduá onda The Belmonts y letra intimista con cachos a lo Pablo Carbonell existencial), y en el medio se inspiró en sus exnovias (enlazó dos sobre la famosa Raquel: la springsteeniana y derrotada 'Luces de Atocha' y el tango en esta ocasión sarcástico 'Éramos tan jóvenes', que le iría como anillo al dedo al torero Ponce por lo de su nuevo amor de 21 años), en sus ídolos ('Canción para Woody Allen', la cima de la cita, «'desdedicada' a Mia Farrow» y entonada con sentimental vibrato vocal) y, claro, coló más sobre sí mismo ('Sólo los camareros saben que es mi cumpleaños', la otra que cantó pegado a la barra, cuando confesó en la introducción: «no sé vosotros, pero yo hace años que los celebro solo, apago el móvil y me paso por ahí todo el día»). Nota aquí.
El romántico e irónico cantautor dylanita getxotarra Íñigo Coppel interactuó con la audiencia atenta y conmovida que atendió a su matinée sabatina en el pub Residence
El romántico, mitómano y dylanita cantautor Coppel (tiene familia alemana, como reveló antes de una canción), un getxotarra residente en Madrid, dio el sábado al mediodía su primer concierto tras cinco meses de parón pandémico en el pub Residence, que se llenó de gente salvando las distancias. Reconocimos a músicos como Francis Doctor Deseo, Dani Merino, Lee Perk y uno de Los Retros, y a ilustres como Bolo, amigo del artista, quien ofreció un recital de 16 canciones en 87 minutos levemente menguantes pero siempre estupendos («perdonad que esté desentrenado, es normal en los tiempos actuales», se excusó al final el muy autocrítico que actúa siempre sin atril).
Abrió la sesión hablando de sí mismo en 'El pueblo contra Íñigo Coppel' («gracias por venir a escuchar a este santo que a veces se cansa de luchar» reza la letra trágica y no creemos que victimista; al acabar la primera bromeó el cantautor rock: «cinco meses sin tocar, estoy agotado»), cerró también hablando de sí mismo pegado a la barra en 'La balada de Íñigo Coppel' (con gorgoritos duduá onda The Belmonts y letra intimista con cachos a lo Pablo Carbonell existencial), y en el medio se inspiró en sus exnovias (enlazó dos sobre la famosa Raquel: la springsteeniana y derrotada 'Luces de Atocha' y el tango en esta ocasión sarcástico 'Éramos tan jóvenes', que le iría como anillo al dedo al torero Ponce por lo de su nuevo amor de 21 años), en sus ídolos ('Canción para Woody Allen', la cima de la cita, «'desdedicada' a Mia Farrow» y entonada con sentimental vibrato vocal) y, claro, coló más sobre sí mismo ('Sólo los camareros saben que es mi cumpleaños', la otra que cantó pegado a la barra, cuando confesó en la introducción: «no sé vosotros, pero yo hace años que los celebro solo, apago el móvil y me paso por ahí todo el día»). Nota aquí.
Kiko Tovar
Víctor nos cuenta en su Blog.
KIKO TOVAR NOS SORPRENDE CON "TU DELAY"
Muchos recordamos a Kiko Tovar guitarra en mano, coleta en pelo y bocadillo de calamares en canción. Han pasado más de 20 años desde que sonase en todas las radio con aquel "No sé tu nombre". Han pasado 15 años desde que rugiese junto a los tigres Alejandro Martínez, Paco Cifuentes y Miguel Danart. Han pasado 10 años desde que compartiese canciones con Dantart en "Cronopios". Y últimamente nos sigue regalando su ingenio, su humor y su talento para hacer canciones junto a Pepe Macías con "Los Pocos".
Hace muy pocos días, Los Pocos han sido de los primeros artistas en hacer un concierto en esta "nueva normalidad" con todas las medidas de seguridad, al aire libre en Perales del río (Getafe). Crónica aquí.
Fernando Lobo
FOLIO EN BLANCO
No sé muy bien qué escribir,
ante el folio me bloqueo,
sin ideas titubeo
¡Qué lírico sinvivir!
¿Será este mi nadir?
No me inspira ningún tema,
eh, Houston ¡Tengo un problema!
¡Van a echarme del mester!
...aunque al final, sin querer,
ha salido este poema.
#DécimasLobunas
No sé muy bien qué escribir,
ante el folio me bloqueo,
sin ideas titubeo
¡Qué lírico sinvivir!
¿Será este mi nadir?
No me inspira ningún tema,
eh, Houston ¡Tengo un problema!
¡Van a echarme del mester!
...aunque al final, sin querer,
ha salido este poema.
#DécimasLobunas
domingo, julio 26, 2020
Rodolfo Serrano
De mi reciente libro Un Cadillac de Segunda Mano:
Ya no somos los mismos
A Karmelo C. Iribarren
Salgo poco. Lo justo
para no olvidarme de bares y de amigos.
Y no discuto ni siquiera con la tele.
Me aburren los periódicos y solo
algún libro de versos me interesa.
Paseo por las calles que ahora siento
territorio enemigo. Ni siquiera pretendo
recordarte.
Alguna vez -y muy de tarde en tarde-
me retorna el deseo.
La dulce desazón de un cuerpo joven
que me inspire mis vicios solitarios.
No fumo. Escribo poco.
De vez en cuando un verso como éste.
Y poco más. En momentos de duda
-mientras espero al médico o voy a la farmacia-
desearía llamarte y comentarte
que hace un calor de muerte
o que el nuevo Gobierno es el de siempre.
Pero nunca lo hago.
Sé que hace ya tiempo
dejaste de temblar cuando veías
mi nombre en tu teléfono.
***
La foto me la ha prestado mi amigo Raul Cancio (Dar un toque a la foto para verla en todo su esplendor)
Ya no somos los mismos
A Karmelo C. Iribarren
Salgo poco. Lo justo
para no olvidarme de bares y de amigos.
Y no discuto ni siquiera con la tele.
Me aburren los periódicos y solo
algún libro de versos me interesa.
Paseo por las calles que ahora siento
territorio enemigo. Ni siquiera pretendo
recordarte.
Alguna vez -y muy de tarde en tarde-
me retorna el deseo.
La dulce desazón de un cuerpo joven
que me inspire mis vicios solitarios.
No fumo. Escribo poco.
De vez en cuando un verso como éste.
Y poco más. En momentos de duda
-mientras espero al médico o voy a la farmacia-
desearía llamarte y comentarte
que hace un calor de muerte
o que el nuevo Gobierno es el de siempre.
Pero nunca lo hago.
Sé que hace ya tiempo
dejaste de temblar cuando veías
mi nombre en tu teléfono.
***
La foto me la ha prestado mi amigo Raul Cancio (Dar un toque a la foto para verla en todo su esplendor)
Fernando Lucini
Fernando nos cuenta en su Blog.
MI VIDA ENTRE CANCIONES 1
Nací en Girona el 11 de febrero de 1946 y fui bautizado, siete días después, en la mismísima catedral de la ciudad; hechos que acontecieron de forma totalmente accidental pero de los que me siento muy orgulloso.
Me encanta cada vez que releo la octava página del Libro de Familia de mis padres, en la que, con una perfecta caligrafía a tinta y plumilla de la época, queda demostrada mi «nacencia» catalana, según consta en el tomo 89, página 377, del Registro Civil; o cada vez que contemplo mi partida de bautismo firmada por «el infrascrito», cura coadjutor de la parroquia de la Catedral del Obispado de Gerona (en aquel momento esa «e» en el nombre de mi ciudad natal era radicalmente intocable).
Decía antes que mi nacimiento en Cataluña fue totalmente accidental porque en aquel momento mi padre, que era funcionario del Cuerpo de Prisiones, estaba destinado provisionalmente a la cárcel de Girona; pero, al año y medio de que yo viniera al mundo, le trasladaron a Jaén, provincia sureña en la que habían nacido no solo él, sino también mi madre, mi hermano mayor y gran parte de mi familia. Crónica aquí.
Javier Krahe
Víctor nos cuenta en su Blog.
"CANCIÓN PARA JAVIER KRAHE", MUCHO MÁS QUE UN HOMENAJE.
Qué gran sorpresa me llevé ayer navegando por las redes en busca de información de Javier Krahe en el 5º aniversario de su fallecimiento. Reconozco que no conocía a Eduardo Retamero, aunque sí que había leído algo sobre "Boleros imperfectos", su grupo musical. Crónica aquí.
"Somos Antídoto"
Festival "Somos Antídoto": un gran abrazo musical latinoamericano
La convocatoria del "encuentro" virtual es para este domingo desde las 21. Se podrá seguir, con acceso gratuito, desde el canal de YouTube del Espacio de Fraternidad Argentino Cubana (EFAC) y desde sus redes sociales.
Un elenco de artistas encabezado por Silvio Rodríguez, Vicente Feliú, Cecilia Todd, Rubén Rada y Peteco Carabajal para un gran abrazo musical latinoamericano en tiempos de pandemia. Así de simple y así de contundente es la convocatoria del festival virtual “Somos antídoto”, que este domingo desde las 21 se emitirá, con acceso gratuito, desde el canal de YouTube del Espacio de Fraternidad Argentino Cubana (EFAC) y desde sus redes sociales. Bahiano, Susy Shock, Luciana Jury, Patricia Malanca, Daniel Devita, La Charo, Emiliano del Río, Micaela Vita y Juan Saraco de DuraTierra, Alexia Massholder, Gloria de la Vega, Paula Ferré y Mariano Otero, también formarán parte de la programación de un encuentro que incluirá además a Duca Leindecker y Nabru de Brasil, Diane Denoir de Uruguay, Pacífico Libre de Colombia y, según anticipan, sorpresas varias sin develar. Nota aquí.
Manolo Juárez
Murió Manolo Juárez, el hombre académico y popular
Pianista, compositor, arreglador, docente, pero sobre todo un hombre libre: Juárez no quiso ceñirse a ningún dogma, y dejó una obra que brillará a través de los tiempos.
En la siesta del sábado, en la Fundación Favaloro donde desde hacía varios días estaba internado, murió Manolo Juárez. La música de Chopin, como había pedido, y el afecto de sus hijos Pablo y Mora, lo acompañaron en su último momento. Pianista, compositor y arreglador –aunque para él resultaba imposible explicar dónde terminaba una especialidad y comenzaba la otra–, Juárez fue sobre todo un maestro. Tenía 83 años y unas semanas atrás le habían detectado coronavirus. Nota aquí.
sábado, julio 25, 2020
Osvaldo Pugliese
Osvaldo Pugliese: un gran músico y una contraseña
Autor de más de 150 obras, patentó un estilo único como director de orquesta. Y fue un incansable luchador por los derechos de los músicos.
A Osvaldo Pugliese le faltó medio año para llegar a los noventa. Un día como hoy, pero de hace veinticinco años, el corazón le dijo basta y con él se fue un testigo, y a la vez protagonista del siglo XX como pocos. Detrás quedaba un centenar y medio de composiciones propias, y más de seiscientas interpretaciones registradas en todo tipo de soportes: discos de pasta a 78 revoluciones por minuto, simples y long plays de vinilo en 33 o 45 rpm, casetes, magazines y cd´s. A la par, dejaba polémicas políticas y musicales que también signaron su vida: los cortocircuitos y líos con el peronismo clásico por su férrea militancia comunista, por caso. O las críticas que, desembozadamente o no, ensayó frente a ciertos renovadores del tango como Astor Piazzolla y Enrique Francini, o contra rockeros argentinos, a quienes tildó sin pelos en la lengua de "extranjerizantes", "disfrazados", "payasos", y poco duraderos, premonición de mediados de la década del setenta que felizmente no se cumplió. Y de la cual tuvo que retractarse al declarar, hacia el final de su vida, su empatía por Fito Páez. Nota aquí.
María Guivernau
LA BARRA DEL BAR
Bebió el último trago
cerrando los ojos
con la absurda esperanza
de volver a abrirlos
y no chocar de nuevo
con su recuerdo.
Pero sus pupilas dilatadas
se empeñaron en dibujarla
en cada mujer
con la que tropezaba.
Y en sus tímpanos,
como una tortura,
todas las canciones
que una vez bailaron juntos.
Emborracharse para olvidar
y, en sus venas,
combustión de alcohol y amor
haciéndole explotar el pecho.
Bebió el último trago
cerrando los ojos
con la absurda esperanza
de volver a abrirlos
y no chocar de nuevo
con su recuerdo.
Pero sus pupilas dilatadas
se empeñaron en dibujarla
en cada mujer
con la que tropezaba.
Y en sus tímpanos,
como una tortura,
todas las canciones
que una vez bailaron juntos.
Emborracharse para olvidar
y, en sus venas,
combustión de alcohol y amor
haciéndole explotar el pecho.
viernes, julio 24, 2020
Alexis Díaz Pimienta
BORGES Y ELLA
Andas, María Kodama,
a tientas por la memoria.
Dulcinea migratoria.
Andas, María Kodama,
cabeceándole a la fama,
sin voz para la oratoria.
Agua oscura de la noria
donde la sed te reclama.
Andas, María Kodama,
a tientas por la memoria.
(Ultima ficción: María
se come sus manuscritos:
persas, hunos, godos, mitos
y cuentos de Alejandría.
Ultima ficción: María
está ciega torpe gris.
María es todo un país
de nieve y de fantasía.
Ultima ficción: María
fue un cuento de Jorge Luis).
¿Y Borges quién fue, María?
¿Quién fue Jorge Luis Kodama?
Vives al sur de su cama.
Qué ficticia geografía,
cuánta brújula baldía
para saber si aún te ama.
Ginebra es toda esta gama
de bastón y tanguería.
¿Y Borges quién fue, María?
¿Quién fue Jorge Luis Kodama?
(De mi libro "La sexta cara del dado", Colección San Borondón del Museo Canario, 1997)
Andas, María Kodama,
a tientas por la memoria.
Dulcinea migratoria.
Andas, María Kodama,
cabeceándole a la fama,
sin voz para la oratoria.
Agua oscura de la noria
donde la sed te reclama.
Andas, María Kodama,
a tientas por la memoria.
(Ultima ficción: María
se come sus manuscritos:
persas, hunos, godos, mitos
y cuentos de Alejandría.
Ultima ficción: María
está ciega torpe gris.
María es todo un país
de nieve y de fantasía.
Ultima ficción: María
fue un cuento de Jorge Luis).
¿Y Borges quién fue, María?
¿Quién fue Jorge Luis Kodama?
Vives al sur de su cama.
Qué ficticia geografía,
cuánta brújula baldía
para saber si aún te ama.
Ginebra es toda esta gama
de bastón y tanguería.
¿Y Borges quién fue, María?
¿Quién fue Jorge Luis Kodama?
(De mi libro "La sexta cara del dado", Colección San Borondón del Museo Canario, 1997)
Sofia Ellar
"Me preocupa que mi inspiración siempre se base en tener altibajos personales"
Lo que empezó siendo un proyecto de fin de carrera, ha terminado con Sofía Ellar cumpliendo sueños como actuar en el WiZink Center de Madrid o publicando varios discos de estudio.
Lo que empezó siendo un proyecto cualquiera de fin de carrera, ha terminado con Sofía Ellar (Londres, 1993) cumpliendo sueños como actuar en el WiZink Center de Madrid.
Para su familia la música nunca fue una opción de futuro. Tenía que estudiar algo "menos arriesgado" aunque su tiempo libre lo dedicase a cantar. Se matriculó en la privada IE University para cursar ADE y estuvo tocando en lo que recuerda como "discotecas en las que te pagaban 20 pavos o te invitaban a un par de cervezas y nadie te escuchaba". Pero al llegar el trabajo de fin de grado su cabeza hizo clic. ¿Por qué no juntar lo aprendido con su pasión por la música? Decidió que crearía un proyecto de carrera musical que ha terminado por convertirse en algo real. Nota aquí.