El buen psicópata
La columna ya estaba escrita. Había pasado por alto el concierto del Indio en Olavarría, y me iba a referir a otro asunto. Pero el domingo desperté con las noticias conocidas por todos, y lo primero que me vino a la cabeza fue un reportaje que leí hace muchos años: aquel de Enrique Symns a Solari, en la revista Cerdos y Peces, cuando aún eran amigos y Symns hacía monólogos en los shows de los Redondos.
En esa entrevista, Solari desplegaba su reflexión en torno a los psicópatas del siglo XXI: decía que la única manera de sobrevivir al sistema que se iba gestando en el nuevo orden mundial era volverse un psicópata. Era enero de 1987, en ocasión del lanzamiento de Oktubre, y el Indio explayaba una teoría que también convertiría en canción, dos años después, en “La parabellum del buen psicópata”. Decía Solari: “Para mí [los psicópatas] son héroes urbanos potenciales que no han tenido mucho éxito en su relación con los demás. No resulta aventurado pensar que el psicópata es un tipo de vanguardia, un nuevo modelo de personalidad que en el siglo XXI podría ser la expresión central de la naturaleza humana.” Y cerraba la idea con una autorreferencia premonitoria: “No me gustaría convertirme en un psicópata, yo preferiría que este sistema no prosperase.” Nota aquí.
0 comentarios:
Publicar un comentario