jueves, diciembre 07, 2023

Clásica y Moderna

 Con sus 6.000 libros intactos y el piano de Sandro, reabre Clásica y Moderna, símbolo cultural de Buenos Aires

Será el lunes en el mismo espacio de Callao y Paraguay que dirigió Natu Poblet hasta su muerte en 2017.

Se trata de una iniciativa de Raquel Rodrigo, que también recuperó El Tropezón y apunta a salvar el Teatro 35 a pocas cuadras.

Poner en valor y reabrir Clásica y Moderna parecía una quimera. Sin embargo será realidad el próximo lunes cuando Raquel Rodrigo, alma mater de este proyecto, ilumine de nuevo uno de los reductos culturales y gastronómicos más queridos de Buenos Aires, el mismo que la inolvidable Natu Poblet –fallecida en 2017– convirtió en una marca de la Reina del Plata.

Rodrigo recibe a Clarín Cultura en el subsuelo de El Tropezón, otro emblema porteño que rescató hace seis años, y nos advierte que tengamos cuidado al bajar y subir la escalera “que es de 1896”.

Pero antes de entrar en materia cabe presentar a Raquel Rodrigo, una mujer activa (es abuela y madre de tres hijos de 40, 36 y 33 años), de mirada directa, a quien se le advierte de inmediato una energía emprendedora.

Docente y fundadora de una escuela modelo en Morón, fue desde 2003 y hasta 2019 –cuando la artista se retiró– la productora en Argentina de Carmen Flores, hermana de la inolvidable “Faraona” Lola Flores. Con ella recorrió desde La Quiaca a Ushuaia en giras artísticas. Es además parte de una Pyme familiar de alimentos.

¿Cómo se decidió a poner en valor Clásica y Moderna que cerró en 2019 con una carga importante de deudas?

Así comienza la historia. “Clásica tiene mucho que ver con la historia de El Tropezón. La clave es recuperar estas joyas de Buenos Aires que están cerradas por distintas razones. Yo amo lo porteño y me parece fundamental reabrir estos espacios. Un día pasé por Clásica y Moderna, en avenida Callao 892, y vi que las cortinas estaban bajas, muy feas, con grafitis, y me pregunté por qué estaba cerrado. Allí comencé a buscar a la dueña de la propiedad y le dije que quería comprar o alquilar. La familia, que es del interior, no quiso vender, pero aceptó alquilarme el espacio y yo compré todo lo que está adentro”. Nota aquí.




Antonio de Pinto

 

Fran Fernández

 


Miguel Cantilo

 "El sistema imperante está generando autómatas"

El músico, que actuará en el Teatro Picadilly, propone "una auténtica toma de consciencia" para salir de la situación actual. “Hay que despertar del diseño global de nuestra sociedad", dice. En el disco que presentará esta noche participaron invitados ilustres, desde Litto Nebbia, hasta León Gieco, pasando por Hilda Lizarazu, Claudio Gabis y Jorge Durietz. 

-¿Despertar de qué, Miguel?

-De la dormidera en que estamos.

Miguel Cantilo ha sido siempre un detector de realidades. Un traductor -dicho mejor- de situaciones complejas de la vida cotidiana a lenguaje de canción. Casi que sobra a esta altura, recordar que fue él quien una vez escribió “La Marcha de la Bronca”, para darle voz a una generación que de eso estaba constituida. O que de su pluma también salieron canciones más jugadas, incluso, caso “Apremios ilegales” (Apremios ilegales, dolores genitales / Pistolas y cuchillo por toda tu piel /Picana en los testigos, muriendo de alaridos / Por más que grites fuerte no van a escuchar), o la tan bella como necesaria “En este mismo instante”, que explotó cuando Malvinas, más de una década después de su concepción. Lo que no sobra tanto –lamentablemente- es echar un vistazo sobre la cosecha solista del cantautor que, vaya a saber por qué motivo, no ha tenido el mismo impacto que Pedro y Pablo. 

Discos enteros como Canciones para vivir mejor o Saqueo, donde Miguel denuncia in situ, durante el primer lustro de la década del 90` y con buena parte de la población imbuida en eso del fin de las ideologías, las atrocidades del experimento neoliberal continuador de la dictadura. Algo que sintetizará, pero en reversa, a través de otro disco clave, premonitorio de una era que pintaba en sentido contrario: Sudamérica Va (2003). “ Olelé olalá, Sudamérica va / A pasión, dignidad / Y un compás pa’ bailar / Olelé olalá Sudamérica va / A crecer de verdad / Sólo con unidad”. Y así.

Ahora, dado lo dado, parecen volver tiempos similares a los que generaron la marchita más popular del país, después de la peronista. “Hay que despertar del diseño global de nuestra sociedad, planificado con mucha `muñeca´ por los esbirros del Gran Poder Económico Mundial Concentrado, que somete a la población a una conducta hipnótica y soporífera, basada en el consumo de imágenes, comida chatarra, fármacos, entretenimientos, y desinformación”, se despacha a gusto este trovador de 73 años y 32 discos, incluidos los Pedro y Pablo, Punch y una larga cosecha solista, que ha superado en número y tiempo a la de sus dos grupos: 19 trabajos, en 44 años.

Todo esto para dar cuenta del flamante disco de Cantilo cuyo nombre es el de la palabra con que arranca esta nota: Despertar. Dotado de catorce canciones, y de compañías que van de Litto Nebbia, Hilda Lizarazu y León Gieco a Kubero Díaz, Claudio Gabis y Jorge Durietz, entre otros y otras, el trabajo será escuchado por primera vez en vivo en CABA, este jueves a las 21 en el Teatro Picadilly (Corrientes 1524), como corolario de una gira argenta con paradas en Traslasierra, Villa los Alamos, Unquillo y Córdoba Capital; Rosario, Mendoza, Merlo, San Luis; y La Plata. “Se trata también de despertar de una inmediatez agobiante y distractora de sus verdaderos fines: crear millones de autómatas sonámbulos que siguen un programa de sometimiento esclavista, sin plantearse ni siquiera para qué atraviesan esta existencia”, insiste Miguel, ante PáginaI12.

Publicado por el sello “Che Discos”, Despertar fue grabado entre España y la Argentina, bajo la especial gravitación de Mariano Díaz, pianista, compositor, arreglador y productor del disco, además de las participaciones de Pablo de la Loza y Anael -hijo de Miguel- en lo concerniente a la ingeniería sonora. “La propuesta del disco se basa en una auténtica toma de consciencia de nuestra situación personal, a través de la observación crítica de los métodos con que el sistema materialista imperante va erosionando nuestras libertades, degradando nuestros valores y generando autómatas que cumplen un programa a rajatabla, dictado por la necesidad de subsistir”, profundiza Cantilo.

-Tremendo elenco juntaste para el disco. Ya había pasado con Clásicos, donde muchos músicos grabaron tus temas más populares en 2005, pero ahora doblaste la apuesta, porque la cosa va con temas nuevos. ¿Cómo y por qué surgió la participación colectiva?

-Fue una idea que íbamos madurando con Mariano Díaz. A medida que íbamos avanzando en los arreglos, se nos iba ocurriendo convocar voces e instrumentos de monstruos sagrados que admiramos sinceramente y que se prestaron gentilmente a colaborar con cada tema. La diferencia con Clásicos es que, como los de Despertar son temas nuevos, tenían que ser sometidos al acuerdo y aprobación de cada intérprete, por lo cual les ofrecíamos variantes en forma y contenido, y ellos eligieron aquellos con los que se sentían más identificados. Nota aquí.



Arco

 


Fito Mansilla

 


Luis Reginato

 Mirá Quien Vino: Hoy Luis Reginato

Pertenece a la tercera generación de una familia de enólogos y viticultores. En la actualidad es Director de Viñedos para la familia Catena Zapata y winemaker de Luca Wines. Como profesional se destaca por su profundo conocimiento. Es uno de los grandes estudiosos del terroir de Argentina.

Edad: 48 años

Cargo que desempeña en su empresa: Jefe de viñedos en Catena Zapata y enólogo de Luca Wines.

¿Dónde naciste?

En el Hospital Español, pero en ese momento vivía en La Consulta así que me identifico como consultino.

¿Tenés algún hobby?

 Aprender, lo que sea. Todo me interesa.

¿Qué es lo que mejor sabés cocinar? 

 Asado

¿Se puede tomar vino tinto con soda o con hielo?  

Claro que sí…

¿A cuáles de tus colegas admirás? 

A varios, los chicos de mi equipo en Catena Zapata son excelentes. Y coetáneos están: Martin Ariza, “Colo” Sejanovich, Ale Vigil, los hermanos Fourcade y Facu Yazli. Sólo por nombrar algunos. 

¿Choripan o sushi? 

Sushi

Un lugar en el mundo…

El Valle de Uco.

¿Que tomás cuándo no tomás vino? 

No sé, calculo que agua. Si es con alcohol me gusta el gin tonic. Pero elijo el vino, por lejos. Nota aquí.



Maggie Cullen & León Gieco

 

Luis Quintana

 


Enrique Bunbury

 Enrique Bunbury, la canción en los huesos

Las referencias a Héroes del Silencio fueron algunos de los picos de un show de todos modos basado en la carrera solista del cantante, que tiene con qué defenderse. 

Enrique Bunbury regresó a los escenarios porteños en la noche del martes último con una energía tan sólo comparable con la de estos días de borrasca. Es lo más cercano que se vio este año a una fiera enjaulada que ha recuperado su libertad. Pero sin perder los modales. El único desliz que protagonizó el español, en su escasa y dosificada perorata, fue cuando pidió disculpas por los errores que podía cometer en su performance a causa de la emoción. Justamente el sentimiento fue el motor de su show, y el público no dudó en subirse a esa calesita desbordada de energía. Si la vuelta de The Cure a fines de noviembre sirvió de broncodilatador para el clima de temor casi nihilista que experimenta esta Argentina entregada a las fauces de la incertidumbre política, lo que se vivió en las dos horas de show del ídolo maño fue una sesión de catarsis.

Las poco más de 14 mil personas que acudieron al Movistar Arena se entregaron en cuerpo y alma no al cantautor, sino a sus canciones. Al punto de que temblaban cada vez que sus voces buscaban proyectarse al extender los brazos al cielo. Qué curioso. Hace un año y medio, el ex líder de Héroes del Silencio daba por vencida su quijotesca batalla contra la nada misma. Se quedó sin voz, y estaba por quedarse sin oxígeno. Según la biodescodificación, los problemas respiratorios están relacionados con las ganas de vivir y de ser feliz. Si bien al final se supo que el origen de su mal estaba en el químico de la máquina de humo que se suele usar en los espectáculos, no hay dudas de que el malpasar impactó en él. De lo que puede dar constancia su nuevo álbum, Greta Garbo, que lo trajo a una ciudad en la que conoció de primera mano la pasión que esconde el amor.

Por eso no fue fortuito que eligiera a Buenos Aires para el inicio de esta gira. Sin embargo, a diferencia de la actriz sueca que inspiró el título de su duodécimo disco de estudio, quien decidió retirarse de las cámaras en el clímax de su carrera para convertirse en la reclusa más famosa de Hollywood, Quique (como lo vitoreaba su público en cada “olé, olé”) decidió que a sus 56 años aún tenía mucho para dar. Demasiado. Por eso la fuerza que emanaba desde el escenario no era la de un músico de rock convencional. Era todavía más potente. Su voz encarnaba la potencia barítona de Raphael, pero su sensualidad era tan rockera como la de Sandro. Y ni hablar de la teatralización, tomada prestada del mejor de todos. Del puto amo del rock and roll, Elvis Presley. Bunbury, en estos seis años de ausencia, se convirtió en ese hermoso mito de Prometeo.

“Ustedes saben los tiempos que vivimos. Hoy más que nunca apuesten por el rock and roll”, propuso el músico en la introducción de “Apuesta por el rock and roll”, cover que supera al original, firmado por el también zaragozano Más Birra. Lo dijo en la segunda mitad de su actuación. Si en esa instancia de la ceremonia la feligresía se había entregado plenamente a la parábola, este vicario de la canción rock tuvo que construir esa intimidad. No se trató de una edificación lenta, aunque sí compleja. Pese a que su nombre remite a discos del calibre de Flamingos (2002), El viaje a ninguna parte (2004) o Las consecuencias, amén del cuarteto, Bunbury arrancó por su presente. Tras salir a escena ataviado como un rockero sureño, al estilo de Lynyrd Skynyrd o Johnny Winter, desenvainó su repertorio con “Nuestros mundos no obedecen a tus mapas”, canción que abre Greta Garbo. Nota aquí.



Rubén Goldín


 

Babasónicos

Lichis

 


El Roto

 


miércoles, diciembre 06, 2023

Miguel Cantilo

 Miguel Cantilo, el trovador que no se da por vencido: a los 74 años sigue grabando y tocando acá y en España, donde vive hace una década

Acaba de lanzar el disco "Despertar", con dúos con Fabiana Cantilo, Hilda Lizarazu, Sandra Mihanovich, León Gieco, Lito Vitale y Litto Nebbia.

Vino para presentarlo este jueves en el teatro Picadilly.

Los números son bastante impresionantes: 32 discos en 53 años de carrera, teniendo en cuenta que el primer álbum de Miguel Cantilo fue el debut del dúo Pedro y Pablo en 1970.

Hoy lleva una década viviendo en España y suele venir por varias semanas al país, como hizo ahora, coincidiendo con el lanzamiento de Despertar, su más reciente y sorprendente disco, donde no solo asombra por la variedad de ritmos y letras certeras, sino que además son todos dúos.

Lo acompañaron figuras como León Gieco, Fabiana Cantilo, Hilda Lizarazu, Juan Carlos Baglietto, Sandra Mihanovich, Litto Nebbia, Jorge Durietz, Lito Vitale, Claudio Gabis, Kubero Díaz y Javier Malosetti.

La presentación, junto a varios de los invitados especiales, será este jueves 7 de diciembre a las 21 horas en el Teatro Picadilly, Av. Corrientes 1524.

En plataformas y CD

Como se hace actualmente, las canciones nuevas están en plataformas digitales. Sin embargo Miguel Cantilo inicia el encuentro con Clarín con un saludo y regalando un compact-disco, toda una rareza.

Ante la evidente sorpresa explica: "Hace una semanita que lo sacaron del horno. Nos jugamos a hacer una tirada a pesar de que viste cada vez la circulación de compactos es menor, pero pero para nosotros es el soporte más accesible, porque hacer vinilos ya es un lujo: es caro de fabricar y de comprar individualmente".

La edición del CD le permite retomar una vieja costumbre: la firma de ejemplares, tal como hizo hace un par de días atrás en la disquería Che Discos. "Vamos a ver cómo resulta empujar un poquito el CD antes de que la gente lo consuma completo por las plataformas, que es donde más se escucha". Nota aquí.




Emiliano Brancciari

Vicky Gastelo


 

La Flor de Barracas

 Reabrió un legendario bar de Barracas con casi 120 años de historia y cocina de bodegón

Fundado en 1906, La Flor de Barracas cerró durante la pandemia y volvió con novedades.

Gastronomía porteña a toda hora y espacio para shows y proyección de películas.

La esquina de Suárez y Arcamendia parece una postal del pasado. Allí, se encuentra el histórico bar La Flor de Barracas que con sus casi 120 años de historia le regaló una gran noticia al barrio: su reapertura -con su identidad intacta- tras tres años cerrado.

“No se puede no respetar tanta historia. De ninguna manera podíamos cambiarle el nombre al bar ni cambiar nada de lo que fuera de la esencia del lugar”, dice Hernán Greco, nuevo responsable de continuar con la tradición de este bar notable junto a Agustina Díaz. Conservando ese espíritu, recuperaron cada una de las sillas, las mesas y hasta una vieja pizarra de menú que indica 1906 como año de apertura.

La flor de Barracas es un bar histórico con alma y cocina de bodegón. También, lugar de encuentro de vecinos, sala de ajedrez y otros juegos como dados y naipes, y, como yapa, inaugura Don Narciso Club, un espacio con shows en vivo para disfrutar tomando un vinito con algún entremés.

La historia de la Flor de Barracas

“La Flor… nació en 1906 y hasta la pandemia se mantuvo abierta. Al principio fue un restaurante, después una fonda española atendida por sus dueñas que llegaron a Argentina huyendo de la guerra civil española”, explica Agustina Díaz.

Con los años y bajo otra gestión, el nombre del local cambió. Lo llamaron “La puñalada”. “Eran tiempos en donde las cosas se resolvían de otra manera, circulaban las piñas por acá y así lo nombraron”, comenta Agustina. Luego tuvo sucesivos dueños y recuperó su nombre.

“Cuando llegó la pandemia La Flor cerró sus puertas. Los dueños que tuvieron en la última etapa hicieron un trabajo en conjunto con una escuela y muchas actividades culturales aparte del servicio normal de comidas”, señala Hernán.

Por eso cuando la Flor de Barracas cerró fue una revolución en el barrio. “Todos preguntaban cuándo volverían a abrir”, dice Agustina y agrega que durante un tiempo hubo un intento de sacar adelante al negocio por medio de una cooperativa, pero se terminó disolviendo.

“Y, ahora llegamos nosotros tratándo de resignificar el espacio. De darle valor y restaurar y recuperar todo sin cambiar su esencia”, dice Agustina con entusiasmo en su rostro. Nota aquí.





Karel García & Silvio Alejandro

 


Joaquín Lera

 


Enrique Bunbury

 


Andrés Rábago

 “En el arte hay muchas mentiras y falsos personajes”

El viñetista de EL PAÍS deja de lado su heterónimo más conocido con un libro de aforismos sobre su proceso creativo y en el que señala que “el arte está en el territorio del humanismo, no en el de la política”

Andrés Rábago ha dejado esta vez de lado su heterónimo más conocido, El Roto. Cuando firma con su nombre y apellido es un artista de pintura simbólica, de la que está rodeado en su estudio en Madrid. Sin embargo, su nuevo libro, Parpadeos (Taurus), es una compilación de aforismos, 705, sobre el mundo del arte, en el que deja opiniones sobre pintores, las ferias y los museos. Madrileño de 76 años, seña de identidad de EL PAÍS, fue premio Nacional de Ilustración en 2012 por “su visión crítica, poética, aguda e inteligente” y hace ya 30 años fue galardonado con el Premio Francisco Cerecedo de periodismo por “su capacidad para crear imágenes que no necesitan de palabras para expresar el problema humano en el mundo actual”.

Antes de todo eso fue OPS en los años setenta y ochenta, cuando con un trazo cercano al surrealismo colaboró en revistas humorísticas como Hermano Lobo y La Codorniz, Triunfo (publicación política del antifranquismo) o Madriz, que subvencionaba el Ayuntamiento de Madrid, entonces socialista. Con la llegada de la democracia cambió de heterónimo con El Roto, más negro y satírico, primero en el periódico Diario 16, luego en El Independiente y desde el 5 de febrero de 1996 en EL PAÍS. Rábago, heredero de los grandes ilustradores alemanes de entreguerras y del español Castelao, ha mostrado su obra en el Centro de Arte Contemporáneo de Málaga, el Museo Barjola (Gijón), el Museo del Prado, en 2019, o en el Círculo de Bellas Artes (Madrid), este mismo año. Hasta el 12 de diciembre se exponen en la santanderina galería Siboney los dibujos que acompañan la edición de sus aforismos.

Pregunta. ¿Por qué ha cambiado de registro con un libro de aforismos?

Respuesta. Es una acumulación de ideas que han ido surgiendo a lo largo de varios años durante la práctica de la pintura y que apuntaba en un cuaderno, que aún sigue creciendo. En un momento determinado me pareció que había suficientes como para ser editadas. En ellas dejo constancia de mi experiencia en el arte. Es un libro para aficionados a la pintura, los que frecuentan museos y galerías. Son como apuntes de taller.

P. ¿Qué ha querido transmitir?

R. Son pequeñas visiones de ese territorio menos conocido de mi obra que es la pintura. Podemos prescindir de la biografía de los artistas, o de los estudios sobre su obra, pero creo que es interesante conocer sus experiencias. Nota aquí.



Diego Torres, Angela Torres & Benja Torres

 


Adriana Varela

 


Idígoras y Pachi

 


martes, diciembre 05, 2023

Michel Rolland

 Mano a mano con Michel Rolland, el enólogo francés más influyente del mundo y que revolucionó el vino argentino

Es una de las figuras más reconocidas del mundo del vino, llegó a nuestro país hace 35 años y, si bien trabajó toda su vida en más de 20 países, eligió la Argentina como su segundo hogar, influenciando los estilos, los terruños y a varias generaciones de hacedores locales.

Reconocido como uno de los “flyingwinemakers” más afamados del mundo, este enólogo francés legó al país en 1988, invitado por Arnaldo Etchart. Ya pasaron 35 años de aquel primer contacto con el país y con el vino argentino. Y, en todo este tiempo, Michel Rolland no solo se enamoró de la Argentina, su gente y su comida, sino que también enamoró a muchos otros, que años más tarde siguieron sus pasos. Porque confiando en él, mucho más que en el país, desembarcaron muchos bodegueros y empresarios, en su mayoría franceses, que invirtieron recursos pensando siempre a largo plazo, algo impensado para los locales, siguiendo la visión de este enólogo visionario.

Michel hizo vinos en 23 países, pero fue la Argentina, luego de su Francia natal, su lugar en el mundo. Acá, no solo se dedicó a asesorar a varias bodegas sino también a desarrollar un imponente emprendimiento vitivinícola que, luego de 25 años, sigue siendo único en el mundo; el Clos de los Siete. Cautivado por los Altos Valles Calchaquíes tanto como por el Valle de Uco, él también invirtió sus recursos en el país para tener sus viñedos propios y construir su bodega. Su intención siempre fue muy clara, hacer grandes vinos de terroir para disfrutar, pero también con potencial de guarda y con el Malbec como bandera. Sí, apostó por ese varietal mucho antes y con más fuerza que la gran mayoría de los bodegueros argentinos hacia fines de los 90′. Nota aquí.








Karel García

 


Guada & El Kanka

 


Carlos Lage

 


Ricardo Darín

 Ricardo Darín estrena Elijo Creer: “Es muy difícil encontrar algo que unifique tanto a una comunidad como el fútbol”

En diálogo con Teleshow, el actor habló desde Valencia sobre su participación en la película que se presenta el jueves y rememora el Mundial. Además, cómo ve a la sociedad a un año de esa gesta, su relación con Messi y la posible partida de Scaloni de la selección.

 casi 365 días, el recuerdo del mundial de Qatar aflora en cada esquina, en cada charla de café, en cada potrero, en cada camiseta de la selección que lleva un chico con orgullo hasta debajo del guardapolvos para ir al colegio. La fiebre mundialista no cesa, como tampoco la emoción y el deseo de revivir a cada instante ese lapso infinito de alegría sin límites. Y con el espíritu de rememorar y de homenajear a la selección, la AFA (Asociación de Fútbol Argentino) preparó un documental que reconstruye el camino y las experiencias del conjunto que ganó su tercera copa con figuras estelares como Lionel Scaloni, Lionel Messi y Emiliano Dibu Martínez, entre otros.

Así nació el eje central de Elijo Creer, la cinta que estrena el 7 de diciembre en todos los cines del país. Solo faltaba un detalle: el hilo conductor de todo el relato. Entonces, los productores Gonzalo Arias y Mariano Suez no dudaron a la hora de elegir al narrador de la historia: alguien que también represente a nuestro ADN, que sea sinónimo de identidad argenta en todo el mundo, y ese no era otro que Ricardo Darín. Nota aquí.




Andrés Suárez & Ricardo Moya

 

David Lebón

 


Enrique Bunbury

 "Yo atiendo a la música que me toca el corazón"

Después de dar marcha atrás con su decisión de abandonar los conciertos por razones de salud, el ex Héroes del Silencio trae su reciente disco Greta Garbo.

Al otro lado del zoom, en un set especial preparado para esta entrevista, Enrique Bunbury deja que aflore su sonrisa cuando repasa sus desembarcos por la Argentina. “Cada vez que fui a Buenos Aires, Rosario o Córdoba, el cariño que recibí ha sido siempre inmenso. Y yo he intentado corresponderlo en la medida de lo posible. Aunque siempre menos de lo que debería”, confiesa el cantautor español antes de subirse al escenario del Movistar Arena (está sold out), este martes 5 de diciembre a las 20. “Me trataron excepcionalmente bien y eso lo recuerdo son sumo cariño. El público de Buenos Aires es tan único que es difícil de describir para alguien no haya presenciado un show allá. Supongo que ustedes están acostumbrados a que la gente sea así. Pero cuando viajas por todo el mundo y ves las diferencias entre los públicos, los porteños están en un lugar muy alto en el Olimpo. Si bien con esto no quiero desestimar a los públicos de otras partes, nunca experimenté algo así”.

-¿Y qué es lo que más te llamó la atención del público argentino?

-Intento racionalizar su idiosincrasia, porque se me mezcla con esa pasión a flor de piel. Te podría decir que es un público conocedor. Tiene una historia del rock patrio y del rock internacional. También suele reflexionar y filosofar sobre el rock.

-Tu correspondencia y constancia para con la Argentina ya se tornó en influencia. Hoy hay artistas nacionales que al momento de cantar o de encarar el rock suenan a vos.

-Me cuesta horrores ver mi influencia en algún lado. No sé si existe, pero me alegra mucho cuando me lo dicen. Me hace ilusión que alguien se haya montado una banda a partir de haberme escuchado. Es un honor. Pero no soy capaz de pensar en esa dirección. Nota aquí.





Héctor Starc

 


Tute

 


lunes, diciembre 04, 2023

Antonio de Pinto

 


Kevin Johansen & Liniers

 


Los Fabulosos Cadillacs

 Los Fabulosos Cadillacs y otra noche histórica en Buenos Aires

Ante 35 mil personas, la banda -una verdadera cofradía- hurgó con finura en su pasado y convirtió al show en un justo repaso por su obra.

Luego de dos demoledores recitales en el Movistar Arena en mayo, Los Fabulosos Cadillacs regresaron a Buenos Aires el sábado a la noche, y lo hicieron con una performance todavía más aniquiladora. Esta vez el escenario que eligieron fue la cancha de Ferro Carril Oeste, lo que significó además su vuelta a un estadio tras su reunión en el Más Monumental en 2008. Aunque la base del repertorio de ambas reunificaciones fue sustancialmente la misma, en esta ocasión la banda hurgó con más finura en su pasado. De hecho, en comparación a lo que presentaron en el domo de Villa Crespo, la lista de temas ofrendada en Caballito se transformó en un justo repaso por su obra, consumando de esta manera una deuda con su gloriosa historia. Porque si de algo no había duda es de que son amos y señores de los misterios del groove, amén de excelsos músicos.

En lo que aún nadie se pone de acuerdo es en el nombre del tour que ensambló una vez más al grupo, a cinco años de su última serie de shows en vivo. Si bien es cierto que este reencuentro coincide con las tres décadas del lanzamiento de su himno “Matador”, al igual que del disco que lo contiene, Vasos vacíos, en el merchandising y la comunicación oficial de los Cadillacs suele leerse “El León del Ritmo Tour 2023”. Ya tendrían que ir preparando las remeras alusivas a la extensión de la gira, porque anunciaron fechas para el 2024. En el medio de su regreso a Buenos Aires, los liderados por Vicentico y Sr. Flavio giraron por los Estados Unidos (ahí debutaron en el mítico Hollywood Bowl de Los Ángeles) y Europa. Y en México establecieron un nuevo récord de convocatoria al citar (mediante un evento gratuito) a 300 mil personas en El Zócalo, la plaza principal de la capital del país. Nota aquí.





Depedro & Vetusta Morla

 


Claudio H