martes, enero 12, 2021

Ana Montojo

 NIEVE

Miro embobada cómo caen los copos
silenciosos y blancos
a la indiscreta luz de la farola
en una sucesión inacabable
que me embruja y me deja
sin voluntad ni afanes, igual que cuando miro
el crepitar del fuego. Es algo extraño,
una atracción fatal que me hipnotiza.
Solo veo tu nombre volando en cada copo
y te siento pegado a mi costado
contemplando las ramas que se visten
de este frío tan cálido
mientras de vez en cuando nos besamos
y sonreímos sin decirnos nada.



0 comentarios: