viernes, septiembre 06, 2024

Joaquin Phoenix & Lady Gaga

 Joaquin Phoenix y Lady Gaga cantan, bailan y arriesgan en ‘Joker: Folie à Deux’

La secuela del filme de Todd Phillips, que se llevó el León de Oro en el festival de Venecia en 2019 y se convirtió en un fenómeno global, merece aplausos por su libertad creativa pero ha perdido buena parte de su trasfondo.

La broma ha ido demasiado lejos. Arthur Fleck quería ser un cómico, hacer gracia. O, al menos, que alguien le escuchara. Pero ha terminado convertido en asesino. Ha matado a cinco personas, incluido un presentador televisivo, en pleno directo. En realidad, los muertos son seis, porque también asfixió a su madre. Pero eso solo lo sabe él. En el arranque del filme Joker: Folie à Deux se pasa los días encerrado en la cárcel de Arkham, y callado. Ya no tiene ganas de contar chistes, por más que los policías se lo pidan cada día. No queda nada de lo que reírse. Y, encima, siguen sin entenderle.

Hay, sin embargo, masas que le adoran. Como los enfervorecidos que le proclamaron símbolo de la revolución contra el poder, al final de la primera película, Joker. Y el aluvión de espectadores que, en 2019, hizo que el filme recaudara más de 1.000 millones de euros. Este miércoles, cinco años después, otra riada de cinéfilos acudió al reencuentro con Fleck. De nuevo en el concurso del festival de Venecia, donde ganó el León de Oro. Una chica, cuando descubrió que podía acceder a la sala, estalló en gritos: “¡Vamos! ¡Siiiiii!”. Cosas del Joker. De Joaquin Phoenix, ahora junto con Lady Gaga, dirigidos por Todd Phillips. Y de la segunda parte de una de las obras más comentadas, celebradas o criticadas de los últimos años. La Folie à Deux (locura a dos) del título, antes de la proyección, era la de todos.

Después, sin embargo, puede que los prosélitos se reduzcan. Se prometía un musical distinto, una historia de amor oscura y arriesgada. La hubo. Aunque Gaga —que encarna a Harley Quinn y su romance con Joker— no colocaría “necesariamente” el filme en ese género: “La música da a los personajes una forma de expresarse”. He aquí la principal novedad. La banda sonora ya era “un personaje más” hace un lustro, según Phillips. Arthur Fleck bailaba y tenía dentro melodías que solo él oía. Pero ahora aparece ella, que también las escucha. Y ambos empiezan a hablarse a través de For Once in My Life, de Stevie Wonder, o What the World Needs Now is Love, de Jackie DeShannon. Todo un giro radical. A costa, eso sí, de algunos pilares de la original: la atrevida reflexión política, el interés hacia la salud mental, el complejo viaje del protagonista. Cuesta explicarse la renuncia. Ya sea hablando o cantando. El resultado podrá verse en los cines a partir del 4 de octubre. Nota aquí.




0 comentarios: