ENCRUCIJADAS
Habitamos en encrucijadas.
En telarañas espesas.
Entre dudas constantes, vivimos.
Nos mentirnos.
Porque en la mentira hallamos la verdad luminosa
donde transitar el dolor.
Soñamos, huidizos,
y se nos desgarra la piel,
esa que teje el tiempo con frágiles remiendos.
Elegir, ¿hacia dónde?
¿Hacia la luz?
¿Hacia el amor?
¿Hacia un sueño?
Tal vez, ¿hacia uno mismo?
Somos herida sobre herida.
Cicatrizamos a destiempo.
Nos perdemos en las palabras,
en los inocuos infinitivos.
Y nos consume el miedo a conjugar los verbos con firmeza.
Miramos sin convicción el futuro
y a golpe de pulmón, resistimos.
Exhalar.
Inhalar.
Así vivimos.
0 comentarios:
Publicar un comentario