Israel desafía (una vez más) la legalidad internacional.
Israel determinó desde la constitución de su estado que no estaba sometido ni a la legalidad internacional ni a la Declaración Universal de Derechos Humanos.
La voluntad de paz de Israel se asienta en los asesinatos de palestinos y en la construcción de nuevos asentamientos en territorios ocupados. En vísperas de la votación sobre la proclamación del Estado Palestino en el Consejo de Seguridad, la decisión de construir en un barrio al sur de Jerusalén, en zona ocupada en la Guerra de 1967, evidencia que la fuerza es la única política de Israel. Crónica completa aquí.
martes, septiembre 27, 2011
Carlos Carnicero
Publicadas por Romano a la/s 8:17 p.m.
Etiquetas: Carlos Carnicero, Palestina
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