Tu calle.
Como de pronto, ayer y sin buscarlo,
me encontré con tu calle. Parecía
que estaba todo igual. Y justo enfrente
estaba aquel quiosco. Las hojas de los árboles
amarillas de otoño y de recuerdos.
Completo aquí.
martes, octubre 30, 2012
Suscribirse a:
Comentarios de la entrada (Atom)
0 comentarios:
Publicar un comentario