Rajoy, manotazos de ahogado
La anunciada subida del IVA es el último cartucho; pero la munición está mojada y no hace daño en los mercados. La tozudez de Ángela Mérkel es antropológica. Se está quedando sola, pero no cede en su austeridad calvinista. Y apretar más las tuercas de los ciudadanos del sur solo conduce a la destrucción de la Unión Europea y al empobrecimiento de generaciones de ciudadanos de Grecia, Portugal y España. Nota aquí.
domingo, abril 29, 2012
Carlos Carnicero
Publicadas por Romano a la/s 10:08 a.m.
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