Luis, Pedro, Lourdes...y Manu
Nos conocemos hace tanto tiempo... Hace muchos años, un muchacho muy joven, con una guitarra acudió a un barracón en Palomeras Bajas. Chavales y chavalas de su edad se reunían a su alrededor para oirle cantar (sin micrófonos, sin altavoces, sin... nada. Sólo él y la voz, esa misma voz que casi cincuenta años después conserva la misma ternura, la misma calidez y humanidad extraordinarias. Crónica aquí.
miércoles, mayo 16, 2012
Rodolfo Serrano
Publicadas por Romano a la/s 6:37 a.m.
Etiquetas: Rodolfo Serrano
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