El lento camino a la destrucción
“- ¿Mi generación? ¿Eso existe?”
Inquiere Jonás, protagonista de Los nadadores, y la pregunta precipita un sobresalto de inquietud en el lector. ¿Existe nuestra generación? ¿Existimos? ¿O, como los personajes de esta novela, maniobramos en torno a la destrucción sin admitir que la ciudad ha quedado devastada por el vacío?. Crónica aquí.
miércoles, mayo 23, 2012
Daniel Serrano
Publicadas por Romano a la/s 6:46 a.m.
Etiquetas: Daniel Serrano, Joaquín Pérez Azaústre
Suscribirse a:
Comentarios de la entrada (Atom)
0 comentarios:
Publicar un comentario