Eternos bodegones porteños.
Esta es la primera parte de un recorrido por los sitios de Buenos Aires que perduran en el tiempo, siempre con gusto a cocina casera.
Tienen el espíritu del barrio en cada mesa y son algo así como la extensión de la propia casa. Una cara familiar da la bienvenida, llama a los comensales por su nombre y pregunta por la familia. Todo sigue igual, a lo sumo llega el wi fi o pantallas de tevé. Nota completa aquí.
miércoles, julio 14, 2010
Bodegones
Suscribirse a:
Comentarios de la entrada (Atom)
0 comentarios:
Publicar un comentario