"La alegría de tocar alivia mis dolores".
A los 80 está atravesando un momento extraordinario en su trayectoria. Toca con su orquesta, graba discos, se reedita parte de su obra y hasta lo premian con un Grammy. Habla de cuánto lo hacen sufrir sus articulaciones, de la felicidad que le da el escenario y de las nuevas generaciones de músicos tangueros. Leer nota.
viernes, octubre 05, 2007
Leopoldo Federico
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