Ismael nos cuenta en su blog.
Cuaderno de bitácora
De madrugada, nuestro barco soltó amarras y contemplamos como se alejaba el puerto de Peumayén. No vimos a nadie agitar sus pañuelos blancos. Aún continuaba la fiesta de despedida y nos llegaba hasta cubierta el eco lejano de la verbena. Mejor así. Leer crónica.
miércoles, diciembre 02, 2009
Ismael Serrano
Publicadas por Romano a la/s 10:00 p.m.
Etiquetas: Ismael
Suscribirse a:
Comentarios de la entrada (Atom)
0 comentarios:
Publicar un comentario