¿A quién le importa que haya escuelas?
Nos acostumbramos a casi cualquier cosa. Hace diez días que cuatro millones –4.000.000– de chicos no tienen clases. O sea: hace diez días que cuatro millones –4.000.000– de argentinos no reciben la educación que el Estado se comprometió a ofrecerles, con la que justifica su existencia, para las cual se queda con los impuestos de sus padres –y de todos los demás. El Estado es un pacto: yo, ciudadano –¿yo, ciudadano?–, te entrego poder y plata para que me entregues, a cambio, ciertos servicios. Si el Estado no cumple ese pacto, no tiene derecho a reclamar un pomo. Nota aquí.
1 comentarios:
Una nota de mierda (que esperar de este último Caparrós).
1ro que miente en los 2 datos duros: cuando sacó la nota iban 8 días de paro, para cumplir el noveno. Y son poco más de 3 millones. Como digo siempre a los opositores, no hace falta mentir para criticar lo malo o lo mal hecho.
Lo 2do malo es el concepto de mierda de que tenemos un pacto con el Estado como podría ser con una empresa privada ¿Qué pretende? Dejar de pagar impuestos? Cobrar por lo que el Estado ofrece? Se mete en el barro el lindo Caparrós al pedo... Pero tengamos claro que le viene gustando el barro...
Además, mete palabras que trslucen una intención de ver al Estado que nos saca la plata mal, como si Caparrós se sintiera Robin Hood o será nomás que enturbia sus ideas por su ultra-antikirchnerismo montano?
Abrazo!!
Publicar un comentario