NOCHES INTERMINABLES
Noches interminables,
bañadas en alcohol,
que anuncian días
en los que es difícil abrir los ojos.
Recuerdos entremezclados
y tu cara dibujada en rostros
a los que regalar colecciones de besos.
Miradas en las que ahogarse
para dejar de temblar
ante tu fachada
cuidadosamente creada,
perfectamente blindada su entrada.
Pieles en las que hacer hoguera
para quemar el deseo de ti
y reducirlo a cenizas,
hasta la próxima vez
que tu roce lo despierte.
0 comentarios:
Publicar un comentario