Joaquín Sabina escribe una nueva canción en su vida
Tras su ronquera en Madrid, el entorno del artista cree que esta será su última gira de gran formato pero ni hablar de retirada ni de renunciar a su esencia de crápula rebelde.
Joaquín Sabina nos tiene en un ay… La primera vez que alguien escucha Lo niego todo puede hacerse una idea. Es el disco más oscuro y pegado a la crudeza de la decadencia de cuantos ha firmado. Por eso, cuando anunció hace un año que se liaba la manta a la cabeza y comenzaba una gira con más de 80 conciertos, su público alternó una alegría y un suspiro. A partes iguales. Con una pregunta inquietante: ¿podrá? Pues, como admite en Quien más quien menos, la cosa quedó con un pie en el tango y otro en el ojalá.
Un maratón así, a sus 69 años era un riesgo… Un esfuerzo físico y anímico –cantar ciertas letras resulta una temeridad que carga el diablo–, bien podía acabar en descalabro. Casi. Sería injusto decir que no llegó. Se quedó a cuatro de la meta, pero cumplió con creces la inmensa mayoría de compromisos en España, América y Europa. Nota aquí.
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