Pedro nos cuenta por Facebook.
Despertarse en Güimar, en casa de la abuela, con la banda, Suso y Cris no tiene precio.
Seguir en la nube desde el sábado es lo mínimo que podíamos hacer... Fito nos mimó, nos abrazó como nos abrazó su banda, su equipo y todo el estadio. Telonear a alguien de esas características y que el público escuche cada verso como si llevaran sumergiéndose en la trova toda su vida es algo díficil de explicar pero fácil de desbordar(se).
Gracias totales y no son suficientes, ojalá podamos repetirlo alguna vez.
Gracias totales y no son suficientes, ojalá podamos repetirlo alguna vez.
¿Qué más? Que el sábado, justo el sábado, (la vida rimando es imparable) cumplió un año La Vida Plena... y como ya es costumbre, cuando cumplen un año estos discos míos, lo subo al ciberespacio para que se lo descarguen libremente, así que:
Que el jueves hacemos el primer concierto de este respiro con Suso en La Laguna, en el Cafésiete y el viernes en Las Palmas en cantautores en Vegueta.
Y ya que hablamos de todo, desde la cama, como siempre que hay fiesta nacional, pienso que de descubrimiento nada, que de intercambio cultural nada y por supuesto que absolutamente nada que celebrar -que estamos celebrando una masacre- ni nada por lo que sentirse orgulloso como pueblo, patria y nada de nada como humanos.
Las cosas por su nombre se entienden mejor, hablemos de invasión, de colonización, de imposición de cultura, de masacre, de explotación y quizá consigamos acercarnos un poquito a lo que pasó realmente.
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