Poemario lll
Ahora que cumplo 30 años, que me veo juntando este puñado de textos para crear lo que será mi tercer poemario y que lo hago organizándolo en tres partes, todo me conduce a un mismo número; y en esto de las palabras, donde cada vez con mayor ahínco uno intenta ser sintético y decir más con menos, imposible no escoger para este libro este título: III.
Entre estos versos hay mucha verdad que me ha regalado la vida, una verdad que muchas veces pone del revés la verdad que creía, equivocadamente, conocer; hay mucha sinceridad descarnada, poemas escritos aguantando la mirada al espejo, con todo el dolor y el miedo que esto genera.
Pero también hay muchos anhelos en estas páginas: deseos que te hacen caminar sin rendirte, soñar sin poner barreras, guardar la experiencia en un cajón e imaginar que se puede volar. Amor como rescate, amor como cura, amor como arma para neutralizar el odio, el rencor y el individualismo imperante. Amor para volver a creer y construir.
Finalmente, en este conjunto de letras también hay textos escritos en ciudades y pueblos que no son los que habito a diario; poemas nacidos en esos rincones donde nuestros ojos miran diferente: más despiertos, más atentos, más limpios. Crónica aquí.
Pero también hay muchos anhelos en estas páginas: deseos que te hacen caminar sin rendirte, soñar sin poner barreras, guardar la experiencia en un cajón e imaginar que se puede volar. Amor como rescate, amor como cura, amor como arma para neutralizar el odio, el rencor y el individualismo imperante. Amor para volver a creer y construir.
Finalmente, en este conjunto de letras también hay textos escritos en ciudades y pueblos que no son los que habito a diario; poemas nacidos en esos rincones donde nuestros ojos miran diferente: más despiertos, más atentos, más limpios. Crónica aquí.
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