EL INVITADO
Desde la loma presiento el valle
el aire fresco
la zarzamora y el arroyo entre espinos y pasto
no oigo sus trinos celestes
ni veo su precioso plumaje
no siento el suave batir de sus alas
a pequeños saltos se posará de rama en rama
él y yo habitamos el valle
al atardecer la soledad nos acompaña
el jilguero
de plumas de terciopelo
coloradas
es mi melancólico invitado:
sólo el viento me trae su fragancia
0 comentarios:
Publicar un comentario