Cuando hace unos días conocí al cantautor valenciano El Cifu y empecé a disfrutar de su trabajo, una de las cosas que más me llamó la atención fue la colaboración que había tenido, en su disco, de un músico hacia el que siento una gran admiración, y que está totalmente vinculado, desde hace años, a la música popular valenciana y, en general, a la música mediterránea. Me refiero a MIQUEL GIL.
Le pregunté a El Cifu cómo había surgido el planteamiento de esa colaboración, y la respuesta fue clara e inmediata: compartía conmigo la misma admiración hacia el gran músico valenciano. Hablamos un rato sobre Miquel y mientras lo hacíamos me vino a la memoria aquel pensamiento de Bob Dylan del que os hablaba ayer: «Cualquiera que desee ser cantautor debería escuchar tanta música folk como pueda, estudiar la forma y la estructura de un material que ya lleva más de cien años circulando». Evidentemente, El Cifu había escuchado y se había empapado, en este caso, del folk, o de la canción tradicional valenciana –de la que Miquel Gil ha sido un gran renovador– y se notaba con mucha claridad en sus canciones. (¡Ojala todos nuestros "cantautores" y "cantautoras" jóvenes realizan ese mismo tipo de aprendizaje!). Crónica aquí.
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