Este otoño
Hace un día de otoño para besarte toda.
Este aire que llega, casi frío y tan tierno,
que recorre las calles y penetra en la casa,
te busca a ti y abraza tu cintura de arena.
Esta luz, como un sueño de las tardes doradas,
nos cierra las ventanas y nos abre el recuerdo.
Un otoño bendito, tan cercano a los cuerpos,
tan lejano a los sueños de un verano a tu sombra.
El aire es pura seda en la limpia mañana,
la calle huele a tierra y a hojarasca amarilla.
Un mirlo, indiferente a mis pasos, se para
en el asfalto y vuela a un azul transparente.
Este otoño tan vivo, tan de todos, tan nuestro
nos lleva hasta la risa de los niños ausentes,
los cálidos abrazos de olvidados amantes
a la suave caricia de la piel de los ángeles.
Extraño es este otoño, como un reloj sin horas.
Pero están estos días y este sol deslumbrante
que dibuja tu nombre en los muros del cielo.
En ti duermen las hojas de todos mis otoños.
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