PLEGARIA
a los dioses y musas de mi floresta
La he visto de más de cien maneras
la he contemplado
con la luz de la aurora
y la música de la atardecida
con el aroma de su bosque
y el contrapunto de la penumbra
en el portal de su Voz
cuando las sombras
tímidas ante ese su encanto
se visten de claro de luna
con guitarra
la he visto nacer entre pájaros
subidos al pentagrama
sonreír con la cálida lumbre de su mirada
la he visto rodeada de más de cien flores
pétalos de terciopelo en el halda
ahí estaba en la playa
entusiasmada con la espuma
oreo virgen de la resaca
cuando escucho la mar
oigo su Voz navegar entre dos olas
jardín de letras cantadas
apoyada en la estela de su barca
¡Oh dioses del Olimpo!
venid hasta la mar
donde las Harmónías cantan
¡Oh musas del Monte Parnaso!
¡Oh anjanas y ninfas todas de la fronda¡
¡venid a mí Calíope y Euterpe
a rasgar las cuerdas de la metáfora!
en la mar de azucenas y esmeraldas
tiemblan mis versos
asustados
su Voz es piedra de columna
de arco y boveda encriptadas
capiteles del jardín marino
donde las begonias de oro danzan
regalaría el jardín entero
si abrís la mar de arriba abajo
como se abre la rosa de China con la luz del alba
para que llegue hasta mi bosque
el perfume del Amor
-la dulce Alegoría de su Voz alada
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